glayíu del díi

viernes, 18 de enero de 2013

El comercio va mal, pero... podía ir peor.

Sí, por supuesto, lo afirmo sin dudarlo. Tengo experiencia en el comercio tradicional y, creo, es algo que va cambiando muy lentamente. Bueno, por definir mejor, cambiar si cambia (la fachada, escapartes, mercancía, etc) pero evolucionar... 

Lo que voy a contar es acerca de una experiencia vivida por mi hace una semana en la ciudad de Xixón (Asturies), con motivo de ir hasta allí para repartir unas mercancías de mi hermano por distintos comercios de la ciudad (a veces le echo una mano). De paso, me pidió si podía hacerle un cambio en unas botas de mi sobrino (ya se sabe, regalos de Navidad que no sirven de tamaño, color, forma o que simplemente no gustan). En éste caso, se trataba de cambiar por un número mayor.
Después de haber finalizado el reparto en forma de que el citado comercio me quedase para el final, me dirijo a la calle Magnus Blikstad a la citada tienda (todavía no se si hacer publicidad de ella o no, me lo pienso). La verdad, con las explicaciones que me dió mi hermano (típicas de junto a, pasando tal...) y que en el ticket de compra de la tienda no venía su información correcta (lamentable), no logré ubicarla en el primer paso (iba en coche). Lo de mi hermano ya lo sé, pero lo de la tienda, con su ticket mal conformado, me hicieron, entre los dos, volver a tener que recorrer una de las calles más largas de Xixón. Imaginaros que haceis ese regalo a una persona que viene de fuera de la ciudad... Pues, la verdad, con los detalles que os voy a contar, lo más seguro es que no hubiese "hecho" al cliente. ¿Por qué? Pues allá voy...

Mientras iba de camino, me esperaba encontrar con una máquina registradora un poco arcaica, pero no, era un TPV. Por lo que no
entiendo es porqué, en primer lugar, en su ticket no viene un número de teléfono para poder llamarles si no doy con ellos. Ya lo sé, no voy a pedirles una cuenta en Twitter, pero lo del teléfono es básico. Pero es que en el ticket no venía la dirección de la calle donde está la tienda, sino de la calle Ezcurdia (al otro lado de la ciudad). En fin, ni teléfono, ni dirección correcta... para comenzar. Una vez allí, me encuentro con un comercio tradicional y, que está atendiendo a una clienta. Saludo, me devuelve el saludo. Y,en un momento que la clienta titubea, me pasa atender. Le explico el problema y rápidamente (ahí no hay queja, ni tampoco en la mayoría de comercios) me dice que si cambio de número también será de modelo. Como no me convence (y no se que dirá mi sobrino) le pido un vale (sin problema). Mientras que le pregunto por la dirección del ticket y me responde que es que ahí "tuvieron tienda" ¡¡plaf!! Pero ¿cuándo? ¿en el pleistoceno? ¿ponen tiendas como huevos las gallinas? ¿o me está indicando que están de capa caída? Seguramente, la mayoría irán a la última y más negativa; y eso, se debe de evitar. Y no digo esquivar, digo evitar. Porque resumiendo, su ticket obviaba:
  • dirección correcta (y si encima es la fiscal...)
  • número de teléfono
  • horario
  • "0 patatero" de referencias digitales (web, email, etc)


Y, repito, poseen un TPV (seguramente con acceso a internet). A veces el marketing nos lo cargamos nosotros mismos. Y no por desconociminento, sino por dejadez. Y, hoy día, los detalles marcan la diferencia.
Ahora, os hago a vosotros la siguiente pregunta: ¿le ofrezco nuestros servicios para mejorar su marketing? GRACIAS

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